VUESTRA BODA, ese día tan especial que, cuando llega, la única palabra que es capaz de llenarlo es FELICIDAD. Sin embargo, a veces esa felicidad se puede transformar en una experiencia estresante, agobiante y, por desgracia, ser motivo de discusión con familiares y con la propia pareja.
Llegados a este punto, vale la pena pararse a pensar: ¿necesitamos a alguien que nos asesore y nos ayude con lo que será uno de los días más importantes de vuestras vidas? A esta pregunta muchos de vosotros contestaríais un SÍ rotundo si eso no significara un desembolso de dinero con el que contar, a parte del que ya intuís.
En España, la figura del #weddingplanner u organizador de bodas toma cada vez más importancia a la hora de planificar una boda. Actualmente el 16% de las parejas destinan una parte de su partida económica a este profesional. Lejos está del 80% de parejas en Estados Unidos y del 5% en Alemania o Francia.
La mejor manera de saber si vosotros necesitáis a este profesional es preguntandoos lo siguiente:
¿Conoces toda la documentación necesaria para casarte por la iglesia o para realizar una boda civil?
Si has optado por una boda simbólica, ¿sabes o conoces algún oficiante para guiar el enlace?
¿Alguna vez has organizado un evento?
¿Los preparativos y la toma de decisiones no dependen enteramente de vosotros?
¿Disponéis de tiempo para organizar tu boda?
¿Sabéis exactamente qué tipo de boda queréis, ordenando todas esas ideas que habéis sacado de Instagram, de Pinterest o esas bodas a las que habéis asistido?
¿Queréis sorprender a todos vuestros invitados con un diseño y decoración exclusiva donde cada detalle esté inspirado en vosotros?
¿Seríais capaces de confiar a alguien cercano todos los imprevistos que suelen surgir en una boda?
¿Alguna persona os ayudará con el montaje y desmontaje de toda la decoración el día B?
Si habéis contestado todas estas preguntas con sinceridad, sabréis enseguida la respuesta. A veces las cosas más sencillas se pueden volver muy complejas si no se tiene la experiencia o el conocimiento para ello.
Entonces, ¿un wedding planner es un gasto o un ahorro?
Contar con esta figura desde el minuto 0 va a ayudaros a confeccionar un calendario para seguir unos pasos seguros, va a solucionar todos los problemas que os vayan surgiendo por el camino, va a evitaros el estrés que todo esto provoca y alguna que otra diferencia que podáis tener con alguien y, que un profesional del sector os ayude con con vuestro presupuesto y gustos, va a hacer simples tareas muy complejas para que no solo disfrutéis de vuestro día B, sino de todo el proceso.
Eso va a hacer que ahorréis en tres puntos muy importantes: el tiempo, los recursos y el presupuesto. Así que sí, estadísticamente hablando, contratar un wedding planner para vuestra boda puede ahorraros aproximadamente un 10% del presupuesto.
En x la boca del fraile te ofrecemos esto y mucho más para que ese día tan especial se convierta en el mejor de vuestras vidas.
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